Muchas veces nos queda en casa algún rincón que no sabemos bien cómo aprovechar o qué hacer con él. Muchas veces con sólo pensar un poco podemos encontrarle una funcionalidad a ese rincón tal como se ha hecho en estos casos.
En ocasiones las paredes tienen «desniveles». Esto es exactamente lo que sucedió en este dormitorio. Para sacar partido de este espacio muerto se optó por armar un pequeño tocador con ayuda de un espejo, una silla y una tabla con cajones.
¿No tienes lugar para el escritorio? Pues mira bien a tu alrededor! Quizá encuentres una esquina desaprovechada como esta y puedas construir allí un escritorio que goce de buena iluminación y te permita trabajar con tranquilidad.
Los rincones difíciles suelen convertirse en repisas fácilmente. Una buena forma de que además de repisas se tranformen en escritorios es espaciando los estantes más de lo usual. Así podrás contar con un pequeño sitio donde realizar tus pendientes sin que te molesten.
Escrito por Andrea Korniusza de Decocasa
Imágenes vía: Decoratrix